En un entorno donde cada euro cuenta y cada minuto de atención vale su peso en oro, encontrar una vía para mejorar el inglés de tu equipo sin coste adicional suena casi demasiado bien para ser cierto. Pero lo es. Se llama formación bonificada, y es más accesible de lo que imaginas. Lo único que hace falta es entender cómo funciona y confiar en quien sabe gestionarla.
Este artículo no es un panfleto técnico. Es una guía para responsables de RR. HH., gerentes de pymes o equipos directivos que saben que el inglés ya no es un lujo en la empresa, sino una necesidad diaria. Y que, además, entienden que se puede hacer bien, sin marearse con papeles, y con resultados reales.
Qué vas a aprender aquí (y por qué deberías seguir leyendo)
Esto no va de teoría. Aquí vas a entender, paso a paso y con ejemplos reales, cómo conseguir que tu equipo reciba clases de inglés sin que suponga una carga presupuestaria, ni una pesadilla administrativa.
Te explicaremos:
- Cómo funcionan las clases de inglés bonificadas a través de FUNDAE y por qué son 100% legales, accesibles y efectivas.
- Qué necesitas saber para activar esa bonificación sin perder tiempo (ni dinero).
- Cómo se estructuran los cursos de inglés bonificables para trabajadores en función del tamaño de la empresa, del sector y del nivel del equipo.
- Qué errores cometen muchas empresas y cómo evitarlos confiando en quien domina la normativa.
- Por qué elegir bien al proveedor es tan importante como la formación en sí.
Por qué el inglés bonificable es una herramienta estratégica (y poco aprovechada)
FUNDAE no es un privilegio: es un derecho
Cada mes ya estás pagando por formación. ¿Y si la usaras?
Lo que pocas empresas saben es que cotizan, automáticamente, por formación profesional. Y ese importe genera un crédito anual que puedes recuperar si lo usas correctamente. No es un extra. Es tuyo.
No importa si eres pyme o empresa mediana
La mayoría de empresas tienen derecho a varios cientos o miles de euros al año en crédito FUNDAE. Y muchos lo dejan caducar sin usarlo. ¿Por desconocimiento? A menudo. ¿Por falta de tiempo? También. Por eso es clave contar con ayuda.
¿Quieres conocer cómo gestionarlo? Mira cómo lo hacemos en Crack Business English
Inglés como inversión transversal en cualquier organización
No es solo para multinacionales
Desde un hotel familiar a una empresa tecnológica, pasando por clínicas, fábricas o tiendas online. El inglés ya no es un elemento diferencial. Es la base para operar con proveedores, clientes o partners en cualquier parte del mundo.
¿Y si lo aprenden sin coste? Entonces es un win-win
El trabajador gana en confianza y empleabilidad. La empresa gana en eficiencia, imagen y oportunidades. Y el Estado cumple su función de fomentar la formación continua. Todos ganan.
Así es como trabajamos los cursos de inglés bonificados para empresas
Formación que no interrumpe: se adapta a tu equipo
Evaluación personalizada (y realista)
No todos los trabajadores tienen el mismo punto de partida. Antes de empezar, realizamos pruebas de nivel, recogemos necesidades específicas y proponemos un plan formativo ajustado al grupo o a perfiles concretos.
Clases online en directo o presenciales
El formato se adapta a la empresa. Hay equipos que prefieren reunirse presencialmente; otros, conectarse desde distintos puntos. Ambos escenarios son válidos y están contemplados dentro del modelo bonificable.
Sin papeles, sin quebraderos de cabeza
Gestionamos el alta en FUNDAE, los controles, los informes y el cierre. La empresa solo firma cuando toca. El resto lo hacemos nosotros, con transparencia y garantías.
Qué aprenden los trabajadores (y cómo se traduce en resultados reales)
Comunicar mejor en reuniones, emails y llamadas
El enfoque es 100% profesional. Redactar con claridad, entender diferentes acentos, responder en tiempo real, expresar matices. No es inglés turístico. Es inglés corporativo.
Soltura sin miedo
Muchas personas arrastran inseguridad. Con metodologías activas y docentes cercanos, esa barrera se rompe. Y se nota en la actitud y en la participación.
Mejora tangible en poco tiempo
Las sesiones están pensadas para aplicar lo aprendido desde la primera semana. Se practica lo que luego se usa. Nada de rellenar por rellenar.
Pasos concretos para empezar sin complicaciones
1. Cuéntanos tu caso
Cuántos trabajadores, qué niveles, qué turnos tenéis. Con eso te hacemos una propuesta pedagógica a medida. Sin plantillas. Sin relleno.
2. Calculamos tu crédito disponible
No tienes que entrar en plataformas ni buscar códigos. Nosotros accedemos a FUNDAE y te decimos cuánto puedes bonificar este año. Al detalle.
3. Activamos la formación, sin trámites para ti
Tú te dedicas a tu negocio. Nosotros nos ocupamos de gestionar todo: inscripciones, seguimiento, memorias, certificados…
4. Clases en marcha, y tú ves los resultados
Tu equipo empieza a hablar, a escribir y a usar el inglés con fluidez. Tú ves el cambio. Y encima, sin tocar el presupuesto.
Preguntas frecuentes sobre las clases de inglés bonificadas
¿Cuál es el requisito para bonificar formación?
Que la empresa cotice por formación profesional (prácticamente todas) y que el curso se registre y cumpla las exigencias formales de FUNDAE. Nosotros nos encargamos de que así sea.
¿Cómo sé cuánto crédito tengo disponible?
Te lo decimos nosotros. Solo necesitamos el CIF de la empresa. El acceso es público y lo gestionamos de forma segura.
¿Hay un mínimo de horas o participantes?
No obligatorio. Pero el curso debe tener una duración y seguimiento que justifique su impacto. Adaptamos todo a tu realidad.
¿Puedo formar a equipos con distintos niveles?
Sí. Creamos grupos por nivel homogéneo y establecemos objetivos diferenciados. La clave es la personalización.
¿Cuánto tarda en ponerse en marcha?
Una vez aceptada la propuesta, en 7-10 días puede estar todo activado. Rápido, claro y sin fricción.
Cuando el inglés se aprende sin coste, pero con impacto
Esto no va de ofrecer inglés porque sí. Va de usar un recurso que ya tienes disponible (el crédito de formación) para mejorar algo que impacta en tu día a día: la comunicación de tu equipo.
No todas las empresas aprovechan este derecho. Pero las que lo hacen, repiten. Porque no hay nada más rentable que formar sin coste, mejorar sin interrupciones y crecer sin complicaciones. Y todo empieza con una conversación.
Pide ahora tu propuesta sin compromiso: Accede a tu formación bonificada en inglés
Porque cuando tu equipo se expresa mejor, tu empresa también lo hace.


